Una causalidad que cambió mi vida

Una de mis profesoras preferidas de coaching siempre dice que llegó hasta ese apasionante mundo no por casualidad sino por causalidad.

Y, en realidad, quizá todo sea cuestión de causalidades. Causa – efecto. Así comienza todo.

La causalidad que cambió mi forma de enfrentarme al mundo laboral llegó con el inicio de 2015. Me quedé sin trabajo, un trabajo que me apasionaba, un trabajo que realizaba feliz y en el que me sentía cómoda y valorada.

Los meses pasaban y aunque en ningún momento estuve parada comenzaba a pesar en mí la incertidumbre. Acudí a un encuentro de blogueros en Zaragoza donde coincidí con gente muy interesante con la que charlé, a la que escuché. Que me hizo reflexionar. Me di cuenta de que me tocaba seguir esperando o dar un paso. Hacer algo.

Nunca he sabido conformarme.

Así que decidí comenzar a trabajar por mi cuenta, periodista freelance, suena bien, ¿verdad?

Tenía una buena base. Una rutina de trabajo establecida en mi despacho, unos horarios, una forma de sentarme frente al ordenador, en soledad, y escribir, escribir, escribir, leer, escribir, y leer, y escribir. También formación para ofrecer mis servicios como redactora. Y, por supuesto, ese miedo a pegarme un batacazo enorme. Pero, por otro lado, ¿qué tenía que perder? No tenía trabajo, tenía todo el tiempo del mundo, cierta angustia por no encontrar nada y ganas, muchas ganas, de trabajar. El mayor error hubiera sido no arriesgarse. El mayor fracaso, no haberlo intentado.

Así que sí, tomé la decisión, me hice autónoma. Qué loca, me decían algunos. Olé tú, algunos otros. Yo, en realidad, no lo veía ni de un lado ni de otro. Creía que era el paso que debía dar en ese momento.

Pronto hará ocho meses de aquel día en el que tomé la decisión, respiré hondo, y aquellos nervios que tenía en la tripa se fueron calmando. A veces solamente hace falta saber lo que quieres hacer, decantarte hacia el lado que sea, para que todo parezca más fácil, para que todo se serene. Luego ya vendrán otros nervios. Pero, de momento, me sentía de nuevo en paz.

Ocho meses bonitos. La gente que confiaba en mí ha seguido haciéndolo y por el camino me he encontrado con otras personas que me han hecho seguir creciendo, que me han ayudado a creer que puedo hacerlo, que me han dado la enhorabuena por un trabajo bien hecho y han regresado a mí cuando han necesitado unas letras. Me siento agradecida y contenta, llena de responsabilidad y ganas de continuar respondiendo. Ganas de aprender, siempre.

Bendita locura la que nos lleva a encontrarnos en el lugar donde queremos estar.

causalidad

10 comentarios en “Una causalidad que cambió mi vida

  1. Claro que si !!! . Casi empezamos los dos al mismo tiempo con nuestras andaduras.

    » Cuando haces lo que tienes que hacer a pesar del miedo, te conquistas a ti mismo . Tu fortaleza interior aumenta y ya nadie te puede frenar»

    » Todo el conocimiento del mundo no te servirá para nada si no tienes el coraje de pasar a la acción .»

    Ya hemos empezado
    Así que vamos a por ello !!!!!!

    Un beso , para los dos

  2. Eres valiente Isa. Pero además me encanta leerte porque transmites sensibilidad, ilusión, amor, alegría y muchas cosas más. Triunfarás.

    • Muchas gracias Dori por tus palabras y por estar siempre ahí al otro lado. Me alegro mucho de que te guste 🙂 ¡De eso se trata! Que tengas un gran día. Un abrazo.

Cuéntame...

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s